lunes, 5 de marzo de 2012

UNO CRECE...

Imposible atravesar la vida...
Sin que un trabajo salga mal hecho,
sin que una amistad cause decepción,
sin padecer algún quebranto de salud,
sin que un amor nos abandone,
sin que nadie de la familia fallezca,
sin equivocarse en un negocio.
Uno crece cuando no hay vacío
de esperanza,
ni debilitamiento de voluntad,
ni pérdida de fe.
Uno crece cuando acepta la
realidad y tiene aplomo para vivirla,
Cuando acepta su destino,
pero tiene la voluntad de trabajar para cambiarlo.
Uno crece asimilando lo que deja por detrás,
construyendo lo que tiene por delante y
proyectando lo que puede ser el porvenir.
Crece cuando se supera, se valora,
y sabe dar frutos.
Crece cuando se abre camino dejando
huellas, asimilando experiencias,
¡Y sembrando raíces!
Uno crece cuando se impone metas,
sin importarle comentarios negativos
ni prejuicios,
cuando da ejemplos sin
importarle burlas, ni desdenes,
cuando cumple con su labor.
Uno crece cuando se es fuerte por
carácter,
sostenido por formación,
sensible por temperamento...
¡Y humano por nacimiento!..
Uno crece cuando enfrenta el invierno
aunque pierda las hojas.
Recoge flores aunque tengan
espinas y marca camino aunque
se levante el polvo.
Uno crece cuando se es capaz de
afianzarse con residuos de ilusiones,
capaz de perfumarse, con residuos de flores...
¡Y de encenderse con residuos de amor...!
Desconozco autor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario